Nápoles, una experiencia para toda la vida

“Quando uno straniero viene a Napoli piange due volte, quando arriva e quando riparte”
Se dice que cuando alguien viene a Nápoles, llora dos veces, una cuando llega y otra cuando se va. Y es cierto porque aunque solo estemos a dos horas en avión, viajar a Nápoles es como viajar al pasado, es totalmente diferente a lo que estamos acostumbrados.
La llegada no fue fácil porque la ciudad es muy grande, el tráfico caótico, las calles parecen un laberinto, y hay gente que te intenta vender souvenirs en cada esquina, sin embargo pronto te acostumbras y te enamoras de esta ciudad tan llena de vida y de contrastes.
Hacer un Erasmus con una persona que es tu mejor amigo/a, es una experiencia única, que nos ha permitido aprender y disfrutar juntos de la vida napolitana. La gente de aquí es abierta y amable, aunque muchas personas hablan el dialecto napiltano, difícil de entender.
Esta experiencia nos está permitiendo hacer nuevas amistades de todo el mundo, visitar museos, ciudades, disfrutar de la buena gastronomía y de su clima cálido.
La ciudad está repleta de arte callejero y siempre hay algo interesante que hacer y visitar, incluso hemos podido presenciar la grabación de un anuncio de Dolce&Gabbana en el centro de la ciudad, que como otras prestigiosas marcas, recurren a sus calles para inspirar y ambientar sus colecciones.
La Accademia di Belli Arte es una facultad multidisciplinar, en la que se estudian todos los campos del diseño y del arte, lo que es una ventaja ya que te permite relacionar el diseño con otras disciplinas. Al principio estábamos un poco perdidos porque usan un método didáctico diferente pero ahora nos sentimos a gusto y los compañeros siempre están dispuesto a echarnos una mano.
Animamos  a todos los estudiantes a realizar un Erasmus. Es una experiencia única, que aparte de aprender un nuevo idioma y una cutura diferente, te permite abrir la mente, conocer gente nueva, te enseña a desenvolverte y salir de tu zona de comfort.
Esta estancia será una experiencia difícil de olvidar ya que el recuerdo de sus calles, sus comercios locales, la comida callejera, y sus maravillosos y riquísimos helados, sus islas paradisíacas, estarán siempre dentro de nuestros corazones.